
Ayer a la tarde terminé de ver una de las grandes producciones audiovisuales de comienzo de siglo. Un final que me satisfizo y que, tranquilos, no pienso desvelar ahora. Un final lógico viendo la serie que es. Un final en la línea de The Wire.
Ha sido una serie con la que he disfrutado como con ninguna otra y durante su visionado he intentado convencer o animar a la gente a que la viese. Algunos me han hecho caso y otros no. Puede que dé pereza empezar con ella pensando en las cinco temporadas que hay por delante, pero sabiendo que cada temporada se centra en un caso concreto, esa pereza disminuye. Si os fiáis de mi criterio ved cuatro o cinco episodios de la primera temporada para saber cómo funciona el tema y saber de qué va el asunto. Cuesta un poco, lo sé. Os prometo que una vez vistos esos capítulos no pararéis de desear ver más y os encantará el ritmo pausado de contar las cosas, donde la historia parece que no avanza nada. A los pocos capítulos sin embargo, nos os daréis cuenta de que sin necesidad de ningún cliffhanger la historia ha evolucionada de una manera casi perfecta.
Para finalizar, una anécdota. Se me quedó grabada cierta frase de un blog americano (pena que no guardase la dirección) en el que se decía lo siguiente :
"hay dos tipos de personas en el mundo: aquellos que aman The Wire y los que no la han visto todavía"
Creo que me encuentro encabezando el primer grupo, sin duda alguna.